El Bien Actuar nos da libertad, permite reafirmar cada día la alegría que sentimos al momento de elegir, y decidir el camino que vamos recorriendo.
Reunir fortaleza cada día para enfrentarlo con alegría, destinar pedazos de tiempo para realizar cada una de las actividades conocidas, disposición para revisar con cuidado las nuevas y determinar la mejor forma de llevarlas a cabo, es el plan de vuelo de los buenos resultados físicos, mentales y espirituales.
La vida se convierte en la unión de esos días, el hacer que sea maravillosa y satisfactoria, requiere que al finalizar cada día preferiblemente, para evitar la acumulación y el posible olvido de situaciones y observaciones importantes, revisar cada una de las acciones ejecutadas, convirtiéndonos en un colador que deje pasar sólo aquéllas que sintamos como apropiadas para nuestro mejoramiento continuo.
Muy importante escribir lo que nos mueve, para tener la posibilidad de leerlo continuamente, y reafirmar en nuestro interior comportamientos que hacen la diferencia en la calidad de vida, y que nos indican que estamos construyendo un valioso Ser humano.
Cuando tengamos dudas frente a algo, o a alguien, escribir lo que pensamos al respecto, permite observarlo mejor, y a la vez nuestro interior arrojarnos buenas ideas de cómo solucionarlas, e ir acomodando las palabras poco a poco hasta llegar a la solución, y si se quiere, ya se puede comentar con otra persona.
Antes de esto no es conveniente hacerlo, pues estaríamos mostrando un edificio derrumbado, con la esperanza de que nos dieran el mejor precio por él, y generaríamos en esa persona una imagen equivocada de lo que realmente somos.
Comentar con nosotros mismos, antes de exteriorizar cualquier pensamiento, da tranquilidad a ambas partes, y fortalece las relaciones, pues las charlas se convierten en diálogo constructivo.
Feliz día hoy y todos los días
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