Frente a tantos hechos desconocidos en la existencia, se debe dar mucha importancia a los Valores, ya que ellos se encargan de convertir a los humanos en Seres humanos, en buenas Personas que disfrutan con el bienestar de TODOS, y además nos definen el propósito de cada acto.
El dedicar tiempo diario para analizar el estado de ánimo y los actos realizados, es demasiado importante para determinar qué nos hace Vivir muy bien, y cuáles acciones nos cambian ese estado.
Los cambios de actos para conocimiento de nuevos conceptos sobre la Vida, permiten reafirmar lo conveniente, y desechar lo no conveniente.
El bien estar interior, es el termómetro que indica si es apropiado continuar, reducir, aumentar, o detener la ejecución de un acto.
De ahí la importancia del tiempo diario dedicado a la reflexión.
Cada acto modifica la dirección de la nave, y si no se tiene claro el destino a donde se quiere llegar cada HOY, aparece un mal estar, una nube oscura, una incertidumbre, y se siente que está conduciendo nuestro vehículo, una fuerza diferente a uno.
El convertir en hábitos aquellos actos que nos mantienen interiormente bien, es una conclusión comprobada que invita, y atiende muy bien diariamente a la felicidad, hasta convertirla en residente permanente en nuestra vida.
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